En la actualidad ya no existe duda de que mantener una buena postura durante el sueño es esencial para garantizar una adecuada calidad de descanso y cuidar nuestra salud a corto, medio y largo plazo. Esto se debe a que, mientras estamos durmiendo, podemos llegar a mantener la misma postura durante bastantes horas. Por ello, la postura que adoptamos durante el descanso es fundamental para evitar dolores y el desarrollo de lesiones no sólo en la zona de la espalda, sino también en el cuello y en las articulaciones.
De hecho, queremos poner de relevancia que una mala postura durante las horas de descanso puede generar tensiones en los músculos y alterar la alineación natural de la columna vertebral. Por supuesto, esto tiene consecuencias y puede causar molestias, dolores e incluso limitaciones en la movilidad en el día a día. Del mismo modo, también podemos decir que adoptar una mala postura mientras dormimos puede afectar negativamente nuestra respiración, así como a la circulación de la sangre, pudiendo tener mayores posibilidades de desarrollar problemas cardiovasculares.
Asimismo, cuando descansamos de manera incorrecta, también podemos sufrir otro tipo de problemas, como, por ejemplo, estar sin energía y tener mal humor. Esto puede hacer que rindas mucho menos en el día a día, tanto en el trabajo como en los estudios. Por ello, para asegurar una postura adecuada durante el sueño, es importante elegir un colchón y una almohada adecuados, que se adapten a la forma de nuestro cuerpo y que proporcionen un correcto soporte para la columna vertebral. Por ello, en este artículo nos vamos a centrar en los aspectos generales de la salud postural, para que sepas qué colchón elegir para ti entre los modelos de nuestro catálogo de colchones Pikolín y de nuestra sección de almohadas.
¿Qué beneficios tiene elegir el colchón y la almohada correctos?
El hecho de contar con un colchón y una almohada adecuados para tu cuerpo y tus hábitos durante el descanso puede marcar la diferencia entre una noche de sueño reparador y una noche de insomnio. La elección adecuada de estos dos elementos es fundamental para poder disfrutar un descanso óptimo, ya que nos permiten mantener una postura correcta y alinear correctamente nuestra columna vertebral para evitar, no sólo problemas físicos, sino también problemas mentales, como, por ejemplo, la ansiedad.
Un colchón adecuado proporciona el soporte necesario para nuestro cuerpo y previene dolores de espalda y musculares y nos ayuda a garantizar un buen descanso, pudiendo dormir perfectamente por las noches y despertar con energías renovadas. Recuerda que si no descansamos correctamente, nuestro cuerpo no puede regenerarse a nivel celular, ya que es durante el sueño cuando se puede recuperar después de un día de estrés.
Del mismo modo, disponer de una almohada adecuada mientras dormimos nos brinda un apoyo adecuado para la cabeza y para el cuello, evitando que se generen tensiones en la zona cervical que puedan derivar en dolores durante el día y, a largo plazo, en lesiones. En nuestra sección de almohadas, puedes encontrar distintos tipos dependiendo de cuáles sean tus necesidades de descanso.
Así pues, contar con una combinación adecuada de colchón y almohada es necesario para mejorar la calidad del sueño y despertar con más energía y vitalidad para enfrentar los retos a los que nos enfrentamos en el día a día.
¿Cómo elegir un colchón y una almohada correctos?
Como hemos comentado varias veces a lo largo de este artículo, elegir un buen colchón y una almohada adecuada es un asunto vital para garantizar un buen descanso y mantener una buena salud postural. Por ello, en el momento de elegir un colchón y una almohada, es importante que tengas en cuenta algunos aspectos.
Elegir el colchón dependiendo del tamaño
Lo primero que debes tener en cuenta es el tamaño del propio colchón, con especial atención al ancho. Algunas personas duermen perfectamente en camas de 90 cm de ancho, especialmente aquellas que no suelen cambiar demasiado de postura o moverse mucho por las noches. En cambio, otras personas necesitan camas de mayor tamaño, como las de 105 cm e incluso las de matrimonio, de 135 cm de anchura.
Ahora bien, si duermes en pareja, te recomendamos apostar, como mínimo, por una de 135 o superior, como la Queen Size, de 150 cm o la King Size, de 200 cm. Además, también debes tener en cuenta la estatura de las personas que van a descansar sobre este colchón, ya que, puedes encontrarlas de 180, 190 e incluso 200 cm de largo. Si eres más bajito/a puedes optar por las de tamaño más reducido, como las de 180 cm; pero si eres más alto/a, puedes apostar por las de 190 o las de 200 cm.
La firmeza es importante a la hora de elegir tu colchón
Otros aspectos que también debes tener en cuenta, por ejemplo, es la firmeza del colchón más adecuada para tu cuerpo, ya que no todas las personas pesan lo mismo ni cambian de postura con la misma frecuencia durante las noches. Por ello, cuanto menor sea tu peso, es más recomendable que optes por un colchón de firmeza medio-alta o alta. En cambio, si pesas más, te aconsejamos apostar por uno de firmeza media o medio-baja. Por ello, es importante tener en cuenta la edad de la persona que va a utilizar este elemento para descansar.
Elige el colchón adecuado dependiendo del material
La elección del material puede estar bastante ligado a la firmeza del colchón. Si optas por un modelo demasiado firme o duro, puedes terminar causando presión en los puntos de contacto, mientras que uno demasiado blando puede afectar la alineación de la columna vertebral. Por lo tanto, nuestro consejo es que encuentres un equilibrio entre ambos extremos para poder aligerar los puntos de presión sobre el cuerpo. Entre ellos, los colchones que más se suelen vender en la actualidad son los de viscoelástica y los de látex, aunque hay personas que siguen prefiriendo los de espumación y los de muelles ensacados.
La transpirabilidad y la temperatura del entorno son factores a tener en cuenta
No es lo mismo vivir en una zona donde las temperaturas suelen ser suaves a lo largo de todo el año que en un lugar donde suele hacer bastante calor durante casi todas las estaciones. Los colchones de látex y de viscoelástica son una buena opción para lugares donde hace frío, pero son poco transpirables y menos recomendables para utilizarlos en zonas donde las temperaturas son bastante elevadas y, especialmente, si tiendes a sudar mucho. Por su parte, los de muelles ensacados y los de espumación son más transpirables y recomendables para usar durante el verano, pero en invierno puedes tener frío.
¿Qué debo tener en cuenta para elegir una buena almohada?
En cuanto a las almohadas, podemos decir que es muy importante considerar la posición en la que sueles dormir. Si tiendes a descansar de lado, creemos que una almohada más firme y alta puede ser ideal para que mantengas una adecuada alineación de la columna vertebral y, así, garantizar la salud postural. Si duermes boca arriba, una almohada de firmeza media es la mejor opción para brindar apoyo y comodidad a la zona de las cervicales.
En cambio, si duermes boca abajo, una almohada más suave y baja puede ser la mejor opción. Al igual que sucede con la elección del colchón, también es importante que consideres el material de la almohada, ya que puede afectar la temperatura y la transpirabilidad durante el sueño. Nosotros creemos que las mejores opciones son aquellas que se adaptan al contorno del cuello y de la cabeza, como las de látex o las de material viscoelástico. No obstante, al igual que hemos dicho con el colchón, es necesario que experimentes con distintos modelos y que elijas aquél que mejor se adapta a tus necesidades.