Una almohada es un elemento esencial para poder disfrutar de un correcto descanso en la cama durante las noches. Y ello también tiene efectos positivos en la salud de nuestra columna vertebral y de nuestras cervicales. Aunque a menudo no le damos la importancia necesaria, es importante disponer de una buena almohada que se adapte a nuestra postura y a nuestras características físicas. De esta manera nos proporciona un soporte óptimo durante las horas de sueño.
Por este motivo, creemos que elegir este elemento para el descanso que sea adecuado para ti es un asunto crucial para evitar dolores de cuello, espalda, dolores musculares y articulares e incluso de cabeza. Por lo tanto, es importante saber cómo elegir una almohada para poder disfrutar de un descanso de calidad durante las noches.
Debido a ello, a lo largo de este artículo, como expertos en colchones y descanso, te vamos a proporcionar las claves para saber cómo elegir la almohada adecuada para ti. Vamos a mostrarte algunos factores cruciales como la posición durante el descanso, la firmeza, los materiales, y los distintos tipos de almohadas que existen en el mercado. De esta manera, podrás elegir el modelo que te brinde un descanso reparador y que mejor se adapte a tus necesidades. Sigue leyendo si quieres obtener más información, así como para consultar la sección de almohadas de ColchonClub.
¿Cómo elegir una almohada dependiendo de la posición durante el descanso?
No tenemos duda de que elegir una buena almohada es algo tan importante para el descanso como elegir un buen colchón. Al igual que ocurre con los colchones, debemos decir que no todas las almohadas son iguales ni funcionan de la misma forma para todas las posiciones al dormir. Por este motivo, es esencial saber cómo elegir una almohada adecuada según la posición que adoptas durante el descanso.
Si duermes boca arriba, una almohada de firmeza media puede ser la elección ideal para ti. Esta posición requiere que apoyes adecuadamente la cabeza y el cuello para evitar dolores y molestias. Si duermes de lado, una almohada más firme y gruesa puede ser la mejor opción para mantener la columna bien alineada. Mientras tanto, si sueles dormir boca abajo, posiblemente necesites una almohada suave y delgada para no forzar el cuello durante el descanso.
Además, también debemos decir que existen otros tipos de almohadas ideales para aquellas personas que duermen en distintas posiciones durante la noche. Estas almohadas son aquellas que están elaboradas con materiales que se adaptan a la postura del usuario, como, por ejemplo, la viscoelástica o el látex. No importa qué posición adoptes durante el descanso: es crucial elegir una almohada que proporcione el soporte adecuado para descansar bien durante las noches.
¿Qué almohada elegir dependiendo de los materiales?
Como hemos comentado arriba, saber cómo elegir una almohada es clave para asegurar un descanso de calidad. No todas las personas tienen las mismas necesidades y, por ello, en el mercado, puedes encontrar distintos tipos de materiales que pueden ser adecuados para unas personas, pero no tanto para otras.
En este sentido, podemos decir que las almohadas de pluma o plumón son ideales para aquellas personas que buscan una sensación de suavidad. Son ligeras, muy blandas y mullidas, pero no se adaptan al contorno de la cabeza y del cuello. Como hemos comentado antes, son ideales para los usuarios que suelen dormir boca abajo y tienen que proteger el cuello y no forzar la zona cervical. Sin embargo, pueden resultar poco recomendables para personas con problemas de alergias a los ácaros.
Por su parte, las almohadas de viscoelástica son perfectas para aquellas personas que buscan un soporte firme y una gran adaptabilidad. Este material se amolda al peso y al calor del cuerpo, proporcionando un apoyo cómodo y reduciendo la presión en las cervicales y en la zona de los hombros. Son las almohadas que mejor se adaptan al contorno de la cabeza y del cuello y, por ello, resultan ideales si sufres de dolores de cuello o de espalda, si duermes de lado o boca arriba. Puedes elegir la que resulte más cómoda para ti, ya que, en el mercado, puedes encontrarlas dependiendo del grado de firmeza.
Por último, si no sabes qué almohada elegir, diremos que las de látex son una excelente opción si buscas un soporte firme, pero con un toque de suavidad. Además, son transpirables y cuentan con propiedades antibacterianas naturales presentes en el propio material. Gracias a ello, son una opción excelente para personas con alergias o problemas de sudoración, ya que son muy transpirables. No obstante, al igual que las de viscoelástica, puedes encontrar almohadas de látex de mayor o menor firmeza.
¿Cómo elegir tu almohada dependiendo de su firmeza?
No nos queda duda de que, a la hora de elegir una almohada que se adapte a tus necesidades de descanso, uno de los factores más importantes a tener en cuenta es la firmeza. Nos referimos a la sensación de soporte que proporciona al cuello y la cabeza al dormir y ya hemos hecho referencia a esta firmeza cuando hemos hablado de los distintos materiales que puedes encontrar en el mercado.
Si eres una persona que prefiere disfrutar de una sensación de suavidad durante el descanso, una almohada con una firmeza baja o media puede ser la adecuada para ti. Estas almohadas suelen estar rellenas de materiales como plumas o de fibra sintética, que brindan una sensación de ligereza y comodidad. Antes hemos comentado que son perfectas para aquellas personas que suelen descansar boca abajo, ya que, al ser más blandas, ayudan a reducir la presión en el cuello mientras duermes.
En cambio, si sufres de dolores cervicales o si buscas una sensación de mayor sujeción durante la noche, una almohada de firmeza media o alta puede ser la elección indicada. Este tipo de almohadas suelen estar rellenas de materiales más densos que los anteriores, como la espuma viscoelástica, o el látex, que brindan un buen soporte y alineación de la columna vertebral. Asimismo, también suelen contar con tratamientos anti ácaros y antibacterianos, por lo que siempre son una buena opción. No obstante, dependiendo de cuáles sean tus necesidades de descanso ahora ya sabes cómo elegir la almohada adecuada para ti.