¿Sabías que el 40% de la población duerme mal? Según los datos de la Organización Mundial de la Salud casi la mitad de la población mundial presenta algún desorden del sueño que le imposibilita dormir adecuadamente. La crisis vivida en estos últimos tiempos a causa del coronavirus ha aumentado, así mismo, el número de casos de personas que padecen insomnio, siendo superior al 60% en el caso español.
Elegir un buen colchón resulta de gran utilidad para combatir los problemas de sueño y para descansar. Ello nos ayudará a afrontar el día con mayor energía, razonar con mayor claridad y evitar despistes u accidentes a causa de la somnolencia, entre otras. Cómo elegir un buen colchón en sencillo si sabes cómo. En este artículo respondemos a todas tus dudas relacionadas con el tipo de colchón que debes elegir —como los colchones espuma o los colchones espumación, los de viscoelástica, los de muelles…—, si este debe ser un colchón duro o blando o las medidas de colchones, entre otras.
Todo lo que necesitas saber te lo explicamos en esta guía para encontrar el colchón definitivo.
¿Cómo elegir un colchón?
A la hora de responder a cómo elegir un buen colchón es importante que nos fijemos en tres características esenciales que nos serán de gran utilidad para elegir el mejor producto para cada uno. Para ello es importante que tengamos en cuenta las medidas de colchones, la firmeza del colchón —si es un colchón duro o blando— y el tipo de colchón según si somos personas frioleras o calurosas. Te lo explicamos con más detalle:
- Medidas de colchones: Las medidas colchones va en función, sobre todo, de las personas que vayan a dormir en él. Así pues, no será lo mismo un colchón individual que uno matrimonial, igual que tampoco lo son los colchones infantiles. Por lo general podemos encontrar las siguientes medidas de colchones para adultos:
- Colchón Individuales: 90 x 105 cm de ancho*.
- Colchón Matrimoniales: 120, 135, 140 y 150 cm de ancho*.
- Colchón Gran formato: 160, 180 y 200 cm de ancho*.
- *Todos los anchos suelen comercializarse en largo de 180, 190 y 200 cm siendo el largo más común en el mercado en 190 cm.
- Firmeza del colchón: La firmeza del colchón se refiere a si el colchón es duro o es blando. Esta es una de las características más importantes a la hora de elegir un colchón y las que más dudas suele generar. Y es que acertar con la firmeza del colchón es fundamental para descansar mejor y mejorar el ciclo de sueño —o cantidad de horas que permanece una persona dormida—. Por lo general debemos tener en cuenta 3 factores que influyen en la elección de un colchón duro o blando. Estas son:
- Peso: El peso de la persona sirve para declinar la balanza hacia un lado u otro, en cuanto a colchones duros o blandos se refiere. Así pues, las personas con una complexión mayor deberán elegir un colchón con mayor firmeza, mientras que las personas de complexión delgada deberán decantarse por uno más blando —como los colchones espuma o colchones esponja, entre otros—. Si no tenemos en cuenta esta condición es posible que a la larga nos duela la espalda o que el colchón pueda deformarse y perder su consistencia.
- Edad: La edad de la persona es un factor que influye también en la elección del tipo de colchón. Por lo general las personas mayores que suelen presentar problemas en los huesos o dolores de espalda será conveniente que utilicen un colchón más blando. En el caso de los niños es más recomendable un colchón con mayor firmeza ya que su cuerpo se encuentra en formación.
- Movimiento por la noche: Si eres una persona que se mueve mucho por la noche, lo más recomendado es un colchón duro. Esto es así ya que te permitirá moverte sin esfuerzo y, por lo tanto, no te despertarás.
- Postura al dormir: La postura al dormir determina también la elección de un colchón duro o blando. En este caso debes tener como referencia que si duermes boca abajo será más conveniente un colchón blando para que este no te oprima la zona del abdomen ni los órganos. Además, de evitar dolores en el cuello. Si duermes de lado, lo mejor será una dureza intermedia; mientras que, si duermes boca arriba, será más conveniente un colchón duro para que la columna vertebral no se hunda y ello te cause dolores de espalda.
- Frío o calor: Cómo elegir un buen colchón depende, también, de lo caluroso/a o friolero/a que seas. Podemos encontrar una gran variedad de modelos, aunque no todos son iguales de aptos para cada uno/a. Esto es así debido a la transpirabilidad de los materiales con los cuales han sido fabricados. Si eres una persona friolera, lo más aconsejado es que te decantes por los colchones del tipo látex o colchón de espumación. Ahora bien, si eres una persona muy calurosa, tu opción más aconsejada es el colchón de muelles. En el resto de los casos, puede servir cualquiera de los colchones de viscoelástica, así como cualquiera de los mencionados.
Tipos de colchones
Cada colchón está fabricado con distintos materiales que le proporcionan unas características diferentes, como la transpirabilidad y la firmeza. Estos son los tipos de colchones más populares:
- Espumación: El colchón con núcleo de espuma es uno de los más utilizados en el mundo del colchón hasta la fecha. La calidad y durabilidad de este depende de la resistencia que ofrezca su núcleo de espuma. Al núcleo de espuma se le añaden diferentes tipos de capas (fibras, lana, viscoelástica, etc…) para conseguir el resultado final de firmeza deseado por el fabricante, cuando a los colchones de espumación se les añade una capa viscoelástica se les denomina Colchones Viscoelásticos y son los modelos mas demandados del mercado.
- Muelles: Son colchones que ofrecen una elevada transpirabilidad, evitando el sudor y la acumulación de calor. Estos pueden ser colchones de muelles independientes, colchones de muelles continuos y colchones de muelles ensacados, cada uno con sus diferentes características. Al igual que a los colchones de espumación al núcleo de muelles se le añaden diferentes tipos de capas (fibras, lana, viscoelástica, etc…) para conseguir el resultado final de firmeza deseado por el fabricante.
- Látex: Son colchones cuyo núcleo está fabricado con Látex. El látex puede ser natural de la corteza del árbol, sintética del petróleo o combinadas. Estos colchones incorporan perforaciones para facilitar la aireación. Además, se adaptan muy bien a la postura y facilitan el movimiento. Ofrecen una firmeza media.
- Otros: Se trata de colchones híbridos que combinan los materiales de algunos de los colchones mencionados.
Cada cuánto cambiar el colchón
Por lo general, la vida útil del colchón depende del tipo de colchón o material con el cual esté fabricado, así como también del uso que le hemos dado. De manera general, la vida útil del colchón suele ser de 10 años. Estos deben ser renovados en un lapsus de tiempo de entre 8 y 10 años, aproximadamente.